Clima familiar

El coaching es una herramienta buenísima para empezar a activarnos e introducir pequeñas rutinas en casa que cambien nuestro clima familiar. He podido ver con mis propios ojos como cambiando el clima, modificamos el comportamiento de los peques y me parece realmente importante darnos cuenta de cuales son las dinámicas que estamos procurando en casa y cómo las podemos transformar para entrar en estado de bienestar, no solo en nuestros hijos, sino en todos los miembros de la familia.

 

Os propongo por aquí información importante y os voy dando algunos tips o ideas que os pueden venir fenomenal

Empezamos:

 

 

Realmente sentimos cómo está nuestro clima familiar, nuestra intuición y sensaciones nos empujan a identificar qué energía tenemos en casa y si nos sentimos a gusto con ella o no. A veces el ambiente está crispado por alguna circunstancia interna o externa en la familia, estamos cansados, tristes o decaídos, nos hemos enfadado, estamos contentos, animados o existen conflictos internos que no acabamos de solucionar. Es importante que identifiquemos que clima tenemos, porqué y qué podemos hacer para cambiarlo, porque muchas veces, depende de nosotras mismas que se pueda generar otro ambiente y nos sintamos mucho más a gusto en nuestra propia casa.

 

 

Tal cual, el clima condiciona completamente el comportamiento de los peques y también de los adultos. No se trata de fingir que todo está bien, más bien, identificar sensaciones, transitar emociones, comunicarlas y poder encontrar una salida que rebaje tensiones, enfados o situaciones no deseadas. ¿Os ha pasado alguna vez que entráis en algún lugar donde percibís que no hay muy buena onda  y sentís que también os baja la vibra a vosotras? pues imaginad que eso es permanente en vuestro hogar. Los niños y niñas reaccionan a los estímulos y elaboran su comportamiento en función de lo que el ambiente o situación les transmite. Son esponjas! hagamos un esfuerzo para que absorban buena energía!

 

 

Existen muchísimas dinámicas positivas para que se de un buen clima familiar. Lo primero es que estemos donde queramos estar. Agradecer la familia que tenemos es esencial, que estamos presentes y que nos apoyamos los unos a los otros, más allá de las discrepancias que puedan existir. El apoyo entre los miembros de la familia, la comunicación fluida, la confianza, el poder razonar todo aquello que nos pase y el afecto ante todo, son ejemplos de dinámicas que podemos desarrollar para que todos estemos más a gusto en casa. Vamos a tocarnos, a hablar y a decirnos más que nos queremos, que eso es salud, os lo aseguro!

 

 

Es importante que hagamos por crear lazos fuertes entre nosotros, los de casa. Tejer una red donde poder sostenernos desde la confianza y la seguridad aporta equilibrio a los peques, ayuda al autoconocimiento, al autoconcepto y a la autoestima. La familia es el primer agente social de los peques y debemos darles modelos de relaciones sanas y construidas desde el amor, porque así van a aprender también a relacionarse con los demás.

 

 

Cuantísimas herramientas tenemos a nuestro alcance y a veces no utilizamos las más esenciales. El contacto a través de las caricias mientras estamos en el sofá, el masajito en los pies o en aquella zona que les relaje, los toques de relajación a modo «estoy aquí», las propuestas en familia, salir a pasear, a respirar aire fresco, salir en bici, jugar al parchís, hacer un pastel… no por ser de toda la vida son menos resolutivas, son acciones que se han hecho siempre para unir lazos familiares, hablar cada noche durante la cena, jugar a «a mi hoy me ha pasado»… generar rutinas de compartir opiniones, explicar puntos de vista, escuchar al otro o comunicarse a través de mensajes de amor. El juego da mucha manga ancha a este tipo de herramientas, vamos a divertirnos un poco!

 

 

Sabéis que soy una enamorada de los aceites para generar ambientes y es que me alucina ver como el olor, sin pedir permiso, transforma situaciones y rebaja intensidades, lo tengo más que comprobado! jajajaj

El difusor es ideal porque funciona genial para incidir en el comportamiento de todos los miembros de la familia. Solo hace falta, identificar la tónica del ambiente, elegir bien el aceite que necesitas (me puedes preguntar si andas perdida), poner 5 gotitas en el difusor con agua y esperar 20 minutitos aluciando como las partículas aromáticas hacen de las suyas…

Hay muchísimos aceites y sinergias que podemos utilizar para generar un buen clima familiar, por aquí te dejo algunos ejemplo, te animas a comprobar por ti misma qué hace la magia de las plantas en tu hogar?

 

 

 

Te espero con lo brazos abiertos, siempre

 

 

Compartir

También puedes leer...

Equilibrio en la crianza

Ayer os colgaba un reels sobre encontrar equilibrio en la crianza. De la publicación saco dos cosas claras: es momento de comprarme otro móvil (me

Leer más »